AULAS INVERTIDAS
Traducida del inglés como aula invertida, se considera una modalidad blearning entre el aprendizaje presencial y el aprendizaje a distancia. Durante la pandemia del covid 19 en los años 2020 y 2021, el flipped classroom tomó mucha fuerza pero en lugar de combinar las mencionadas modalidades, combinó la telepresencia o presencia digital con la educación en línea, generando un blearning muy interesante y productivo que, aunque alejado de una real educación virtual, logró sostener los procesos educativos con el apoyo de la tecnología.
AULAS HIBRIDAS
Sin embargo existe otro tipo de aula invertida, una que nace directamente en la educación virtual y muestra un aula híbrida en la que el entorno virtual de aprendizaje se convierte en el núcleo operacional, pero que se combina con todos los procesos externos que permitan construir una experiencia más enriquecedora que la que pueda darse solo dentro del aula virtual. Este blearning combina dos tendencias de la educación virtual: la primera coordinada y controlada por un entorno virtual de aprendizaje clásico en un LMS y la segunda, una libre de LMS y existente en la inmensidad de la red que fomenta el autoaprendizaje.
El aula híbrida entre el LMS y el océano de la red es una apuesta con muchos riesgos, dado que es el momento ideal para que el tutor mantenga su rol como compañero del aprendizaje, donde el rol tutorial se convierte en un acompañamiento al mismo nivel del estudiante y el tutor es otro investigador, otro curioso y otro aprendiz. El peligro de perder el control del grupo es evidente y lanzar a sus estudiantes al mar del conocimiento en la inmensidad de Internet se constituye en un reto con resultados asombrosos.
Si los estudiantes están listos para emprender este viaje, la capacidad investigativa les permitirá desarrollar competencias únicas e indescriptibles, capaces de crear nuevas lineas de experiencia en el aprendizaje, pero sobre todo mejorar los ambientes para que se genere un verdadero conocimiento.